Skip to content
Herboteca Sevilla

Aceites esenciales – el arte de dominar el aroma –

4 de noviembre de 2020

Que nadie te quite tus sueños

Aprender a combinar, mezclar y usar… todo un arte

Un aceite esencial es la esencia volátil extraida de plantas aromáticas mediante destilación por arrastre de vapor de agua.

Se utilizan numerosos procedimientos para la extracción de sustancias aromáticas. Esta operación es una de las tareas más difíciles y delicadas ya que su objetivo consiste en capturar los productos mas sutiles y frágiles elaborados por la planta, sin alterar su calidad.

La destilación por vapor de agua, conocida desde la más remota antgüedad, mejorada por los árabes y perfeccionada por los artesanos de Grasse (Francia), es un procedimiento que arrastra las sustancias aromáticas en una corriente de vapor de agua.

El procedimiento, relativamente nuevo, donominado «destilación por arrastre de vapor de agua» mejora la calidad de los productos obtenidos miniminzando las alteraciones hidrolíticas (en especial de los ésteres) asociadas al proceso tradicional de destilación; la instalacion utiliza una caldera de vapor de agua separada del alambique propiamente dicho.

La mayoría de los aceites esenciales (A.E.) se obtienen mediante destilación por vapor de agua, sin desincrustante quimico y a baja presión.

El procedimiento consiste en hacer pasar una corriente de vapor de agua a través de una cuba llena de plantas aromáticas. A la salida de la cuba y bajo presión controlada, el vapor de agua rico en aceite esencial pasa por un serpentín en el que se condensa. Al salir, un esenciero recoge el agua y el aceite esencial.

La diferencia de densidad entre ambos dos líquidos permite separarlos fácilmente.

Las plantas silvestres de montaña tienen un aroma y una actividad biológica extraordinaria debido, en algunos casos, a su alto contenido en ésteres aromaticos cuya síntesis se ve favorecida por la altitud, la insolación o la sequedad, o por la simbiosis con otras plantas silvestres del biotopo.

La destilación requiere medidas de pracaución importantes: la elevación del alambique, preferentemente de acero inoxidable; el conducto de calefacciónm, a baja presión (0,05 bar); la duración de la destilación, larga o prolongada, que permite extraer todas las fracciones «de cabecera» y «de cola»; o el uso de agua de manantial o poco calcárea…

Muchos aceites se venden como si fuesen 100% puros y naturales están con frecuencia cortados, alargados, diluidos y desnaturalizados con otros aceites vegetales o minerales, moléculas sintéticas de bajo precio, agentes emulsionantes químicos, trementina o alcohol.

Estas profundas alteraciones pueden hacer que los A.E. se conviertan en alérgicos y tóxicos. También se les pueden añadir otros A.E. como por ejemplo el lavandin super, con poco alcanfor y de menos precio, incluido en la lavanda fina. A otros se les corrige el color artificialmente o se les extraen ciertas moléculas. La única forma de ofrecer aceites esenciales de calidad es con unos buenos análisis.

En estos análisis en los cuales se controlan tanto con análisis físicos como químicos, podemos medir desde color, olor, en algunos casos sabor, podemos medir las constantes físicas a una temperatura dada (densidad, solubilidad en alcohol, puntos de fusión y de ebullición, puntos de congelación, poder rotatorio de la luz polarizada e índice de refracción); o bien análisis químicos por cromatografía de gases en la cual se compraran las muestras con otros auténticos y certificados que se usan como patrones de referencia.

Dentro de las calidades tenemos un gran abanico, un abanico que no solo cambia las propiedades del aceite en cuestión , o su etiquetado, sino su aroma y uso.

Por ejemplo tenemos la calidad industrial estándar, proviene de una planta que no se define botánicamente, cultivada industrialmente y cuya recolección no se realiza en el momento preciso. La destilación es incompleta, el aceite no se rectifica e incluso se reconstituye químicamente.

La calidad «quimiotipada», 100% puro y 100% natural, se obtiene despues de una destilación integral de plantas botánicamente identificadas y recolectadas en el momento más adecuado. Pueden proceder de cultivos o ser silvestres. Los componentes bioquímicos del A.E. son conocidos y responden al perfil cualitativo deseado.

Esta es una de las mejores opciones, y si añadimos la siguiente, ya tenemos un aceite esencial de lo mejor.

Certificación BIO, se obtiene de plantas con certificación BIO.

¿Quieres saber algo mas?

Sigue leyendo

¿Sabes que un mismo A.E. puede dar lugar a varios QT (quimiotipos) y que cada uno tiene un uso diferente?

Por ejemplo,

Thymus vulgaris QT tuyanol: este A.E. contiene mayoritariamente tuyanol con propiedades bactericidas, virucidas y neurotónicas.

Thymus vulgaris QT timol contiene mayoritariamente timol, con importantes propiedades antiinfecciosas.

Igual de importante es saber la parte destilada de la planta en cada caso, (flor, raíz, hoja, tallo, corteza, etc…) ya que pueden producir ESENCIAS diferentes, por lo cual es importantísimo indicar el órgano vegetal.

El quimiotipo es muy importante, ya que no solo pueden presentar propiedades terapéuticas muy diferentes sino que su nivel de toxicidad es muy variable.

¿te ha gustado? Siguenos!!